¿Por qué está tan de moda el autocuidado?
Seguro que en los últimos tiempos, habrás visto muchas publicaciones en internet sobre el autocuidado. Quizás incluso en alguna revista. O puede que hasta lo hayas escuchado en la radio o en la televisión.
Tenemos la suerte de estar acudiendo a un momento histórico en el que la salud mental está empezando a ganar fuerza por sí sola y está tomando entidad en lo que a la salud se refiere.
¿Qué papel tiene el autocuidado en todo esto?
El autocuidado son todas las acciones dirigidas a cuidar tus pensamientos, tus emociones, tus comportamientos tu cuerpo y tu alma. Es el hilo conductor de tu salud psicológica.
Llamamos a autocuidado a esos pequeños guiños que hacemos por nosotras mismas cada día, a las acciones que van dirigidas a cuidar nuestra salud psicológica y dedicarnos tiempo de calidad en conexión con nuestra propia esencia. Son las semillas de amor propio que sembramos en el terreno de la cotidianeidad.
Son esas actividades que realizamos de manera cotidiana para proporcionarnos las dosis de bienestar que nos permitan disfrutar de nuestra vida.
También son la manera en la que nos priorizamos frente a todo lo demás que ocurre en nuestra vida, dándonos el lugar de protagonistas. Es una manera de decirnos a nosotras mismas “Yo soy importante”. Generalmente nos conectan con nuestro modo disfrutón de la vida, donde lo único que existe es nuestro propio ser y no hay nada más que hacer, solo sentir.
Convertir el autocuidado en una rutina nos permite interiorizar un diálogo de prioridad a través del inconsciente, donde por medio de actividades dirigidas, nos vamos reservando espacios y tiempos para nosotras mismas, con la intención de trasladar esta actitud al resto de actividades del día.
El autocuidado parte de la premisa de que la mejor persona para darte lo que necesitas, eres tú misma. Nadie mejor que pueda responder a la pregunta de: ¿qué necesitas? Comienza con el reconocimiento de que nosotras somos las responsables de nuestro propio bienestar
El autocuidado es individual: así como cada ser humano es único, el autocuidado es diferente para cada una de nosotras. El autocuidado es escucharse, darse una respuesta honesta y hacer lo que está bien para una en el momento en que te estás preguntando ¿qué necesito ahora? Desde esa posición podrás hacerte cargo de tus necesidades y brindarte lo que precisas.
Podemos disfrutar de distintos tipos de autocuidado. Todos son importantes en la medida en la que responden a tus necesidades y tus afinidades. Quizás unos días estás más disponibles para unos que para otros, o de manera general tienes una predisposición hacia un tipo concreto. Todo está bien.
Conocemos algunos tipos de autocuidado, como:
- Autocuidados de tipo físico:
Es aquel en el cual nos encargamos de nuestro cuerpo físico y nuestra salud. Algunos ejemplos pueden ser: mover el cuerpo, elegir comidas más nutritivas, dormir suficiente, hidratarte, etc.
- Autocuidados de tipo intelectual:
El autocuidado intelectual consiste en ejercitar nuestra mente, estimular el pensamiento crítico y la creatividad. Algunos ejemplos pueden ser: Leer un libro, aprender una nueva habilidad, ver documentales de temas que te interesen
- Autocuidados de tipo social:
El autocuidado social está relacionado con compartir tiempo de calidad con nuestros seres queridos. Algunos ejemplos pueden ser: Pasar tiempo con tus seres queridos, llamar a un viejo amigo, iniciar una conversación
- Autocuidados de tipo sensorial:
Son aquellas actividades dirigidas a proporcionarte un placer sensorial. Algunos ejemplos pueden ser: Encender velas de olores diferentes, escuchar música, caminar sobre una superficie cómoda
- Autocuidados de tipo emocional:
Actividades que permiten conectar con tus emociones y darles un espacio de prioridad. Algunos ejemplos pueden ser: Body scan, ejercicios de introspección, acudir a terapia, diario emociona, arteterapia.
- Autocuidados de tipo espiritual:
Acciones que nos ayudan a entrar en contacto con el lado divino de la vida. Algunos ejemplos pueden ser: Meditación, oración, ayudar a otros, conectar con la naturaleza.
¿Cómo siembras tú esta relación contigo misma en tu día a día?