Muchas personas me preguntan por cómo trabajamos en Psicología para tu Naturaleza y al contestarles sobre el formato online, se extrañan. Me dicen que hablar de cosas tan íntimas a través de una pantalla es un poco frío.
Sin embargo, en mi experiencia, el modelo online unifica aspectos que para mí son esenciales.
¿Qué es la terapia online?
La terapia online –o Psicología online– es la intervención psicológica a distancia mediante videoconferencia y con apoyo de cualquier otro recurso tecnológico que facilite la comunicación e interacción clara y eficaz entre psicólogo y consultante.
¿La terapia online es igual de efectiva que la presencial?
Cuando hablamos de terapia on line, en ocasiones surgen algunas dudas acerca de la efectividad de las terapias en esta modalidad. Si revisamos la literatura científica, hay una evidencia muy sólida, a nivel de meta análisis, que respalda la efectividad de esta modalidad de terapia, equiparándola a la presencial en la mayoría de las ocasiones.
Hay casos o situaciones en los que se puede desaconsejar la terapia on line, como por ejemplo intervenciones con niños pequeños o casos que requieren de técnicas que exigen medios técnicos como el biofeedback o la realidad virtual.
Sin embargo, los estudios sobre modelo de trabajo on line son numerosísimos, y todos muestran resultados en la misma línea: es una forma de terapia totalmente válida y equivalente a la presencial.
Existe evidencia de ser efectivo el tratamiento en la modalidad on line en casos como ansiedad, ataques de pánico, TEPT, TOC, TCA, depresión, fobias, cuestiones no patológicas, autoestima, crecimiento personal, asesoramiento a familias, terapia de pareja, y otras muchas.
Al final de este documento, dejo un listado de bibliografía para consultarlos.
¿Por qué hacer terapia online? Beneficios de la terapia online
A continuación te explico los motivos que encuentro por los que recomiendo hacer terapia online. Estos son los que he encontrado a través de mi formación, de mi experiencia como terapeuta y en mi bagaje como usuaria de este tipo de terapias.
1. Hacer terapia online es más sostenible y por tanto, más ético.
Creo que como sociedad tenemos el reto de la crisis climática encima de la mesa y que deberíamos migrar todos aquellos servicios que se pueden hacer de forma online a este formato. Evidentemente no todos los negocios se pueden hacer online ni toda la psicoterapia, por eso es bueno tener opciones. Pero la gran parte de los procesos de terapia, si se pueden conducir a través de una pantalla.
Tener un centro para terapias (que pueden hacerse online) supone destinar unos recursos (agua, luz, internet, edificio, etc.) que ya tenemos en nuestras casas, y por tanto, sería invertirlos en algo totalmente evitable, y además por partida doble (terapeuta y consultante). Este espacio físico que yo ocupo para hacer algo que puedo hacer desde mi casa, se podría destinar por ejemplo para vivienda o comedores sociales.
Por otro lado, ya no es sólo ahorrar en recursos, sino también no gastarlos. Ir a un centro físico a hacer terapia, supone desplazamiento de algún tipo por mínimo que sea. Eso implica el uso de coche, medios de transporte, zapatillas, ropa que se expone y hay que lavar… Gastos evitables.
Recuerdo que hace unos años, cuando todas las casas tenían bañera, muy poca gente se duchaba. La idea de llegar a casa y darte un baño caliente con espuma era muy apetitoso para muchos. A día de hoy con la situación climática que tenemos, es impensable.
No es ético destinar recursos globales a nuestras preferencias personales.
Y yo lo pienso igual con la terapia. Pudiendo hacerse online, hay que destinar esfuerzos para que se haga así. Y de forma excepcional o complementaria, presencial.
2. Hacer terapia online fomenta una mayor emancipación y autonomía en las personas
Cuando estás haciendo terapia desde casa y a lo mejor tienes una crisis durante la sesión, mi trabajo es enseñarte a que puedas regularte de manera autónoma. Te hago hincapié en lo que ya sabes, tus recursos internos y tus habilidades para recuperar tu centro. Tú eres tu medicina. Tu sabes el camino. Yo estoy para acompañarte en lo que tú estés, pero no te puedo salvar. Mi forma de ayudarte es a que te des cuenta de que tú tienes toda la ayuda que necesitas. Eso te hará depender menos de mí y de cualquier otra ayuda artificial.
3. Te hace conectar más con tus animales convivientes
De hecho, no sólo no te hace depender menos de tu psicoterapeuta, sino que te conecta con tus fuentes de regulación natural. Es muy frecuente en las sesiones online que las personas estemos acompañadas de nuestros animales convivientes. A veces aparece un perro, un gato… o los animales con los que conviva la persona. Ellos forman parte de la familia y pueden ser una ayuda mucho más natural que contar con una persona (tu psicoterapeuta) a la que sólo puedes acceder cuando tienes sesión. En psicología, a esto le llamamos «validez ecológica». La terapia online te permite conectar más con fuentes de bienestar con una mayor validez ecológica.
Los animales convivientes son una fuente de regulación muy importante. Existen muchos datos sobre cómo la textura de sus pelos o pieles, la diferencia de temperatura de sus cuerpos con los nuestros, los olores que desprenden… son elementos que tienen un impacto en tu sistema parasimpático, y por tanto, en tu regulación. Puedes leer más sobre autorregulación y sistema nervioso en esta entrada.
Por tanto, la terapia online también te permite estar en contacto con tus propios reguladores, tanto internos (habilidades, capacidades, fortalezas) como externos (tus vínculos)
4. La terapia online te ayuda a un mayor autoconocimiento y autorregulación.
Cuando hacemos terapia a través de una pantalla, tú también te estás viendo en ella. Cuando me estás contando algo o cuando hacemos alguna dinámica, tú ves tus gestos, tus expresiones y en general, la manera visible que tienes de ser. Cuando hacemos sesiones presenciales (salvo si se trabaja con espejos) únicamente puedes observarte a través de las reacciones que tiene la psicóloga que tienes en frente, pero nunca de manera directa. De esta forma, a través de la pantalla estás monitoreando quien y cómo eres, lo cual siempre es el primer paso para tu autorregulación.
5. Como psicóloga, la terapia online me da más información sobre ti.
Veo qué sitio eliges para la terapia, cómo es tu entorno y sobre todo, cómo eres tú dentro de tu entorno.
6. Tengo más facilidad para apuntarme las cosas en la terapia online.
Si estuviésemos en persona, tendría que apartar la mirada de ti para escribir a mano o usar el ordenador. De esta manera, puedo mantener mi mirada contigo mientras escribo en el teclado.
7. En la terapia online tengo más recursos a tu alcance.
A pesar de que las sesiones están preparadas, si un día tienes que trabajar un asunto que no habíamos previsto, tengo en mi ordenador todo un banco de recursos que te puedo dar en el momento. No necesitamos esperar a una siguiente sesión ni dártela después.
8. Hacer terapia online es más cómodo.
Hacer terapia desde tu propia casa implica que no tienes que hacer nada extra. Estás en casa y te conectas.
9. Elegir la terapia online evita desplazamientos.
Parte de la comodidad también viene porque no tienes que coger un transporte público o el coche, pagar por ello o enfrentarte a la dificultad de no encontrar aparcamiento. Es un plus de flexibilidad geográfica.
Estos son los motivos que me han hecho elegir la modalidad online en mi centro de Psicología.
Por supuesto, la terapia online, como he dicho al comienzo, no vale para todos los casos ni para todas las personas. Pero existe una firme evidencia de su utilidad, y en mi parecer, grandes valores añadidos.
Elegir una opción que se alinea con tus valores, la flexibilidad temporal y geográfica y que permite facilitar labores propias de la terapia, para mí son motivos más que suficientes.
Recuerda que puedes pedir tu sesión aquí.
Bilbiografía
Bibliografía sobre meta-análisis relativos a la eficacia de la terapia online en relación a la terapia presencial:
Andersson, Cuijpers, Carlbring, Riper, & Hedman, 2014; Andersson, Topooco, Havik, & Nordgreen, 2015; Barak, Hen, Boniel, & Shapira 2008; Cuijpers, Van Straten, Andersson, & van Oppen, 2008; Hyler et al., 2005; Linn, Vervloet, van Dijk, Smit, & van Weert, 2011.
Bibliografía sobre evidencia científica que avala la eficacia y potencialidad de la terapia online:
Valero, 2003; Amichai-Hamburger, Klomek, Friedman, Zuckerman, & ShaniSherman, 2014; Baker & Ray, 2011; Berle et al., 2014; Griffiths, Lindenmeyer, Powel, Lowe, & Thorogood, 2006; Perle, Langsam & Nierenberg, 2011; Soto-Pérez et al. 2010; Soto-Pérez, Franco-Martín, & Monardes, 2016.
Bibliografía de estudios sobre la alianza terapéutica en la terapia online:
Cook & Doyle, 2002; Knaevelsrud & Maekcker, 2007; Reynols, Stiles, & Grohol, 2006